El 9 no está. El 9 es Torres, pero para entendernos el 9, el máximo goleador de la historia de la Selección, es Villa. Y no está. Esto que voy a escribir es una obviedad pero estamos en un momento en el que hay que decir que la leche es blanca y el cielo azul.
La decisión de Villa (hola míster, he probado y no estoy al 100%, es mejor que no vaya) es un monumento al deporte, al fútbol, al equipo, a la profesión y a la honradez.
Son muchas cosas: anula un debate que iba a perseguir al equipo todo el campeonato, libera al seleccionador de un marrón, pone en valor el primer mandamiento de la selección: va el que mejor está.
Es una decisión personal que marca el rumbo de un grupo. Tan importante como la estrella que llevamos bordada en la camiseta.
Gracias, Villa. Gracias, Guaje.
Buenas,
ResponderEliminarNo tengo nada contra Villa, la verdad es que el fútbol me preocupa más bien poco, simplemente lo valoro como un deporte más, afortunadamente para mi no soy fan, seguidor o aficionado.
Respecto a poner por las nubes a Villa me parece una equivocación como te he comentado por Twitter, la honradez hubiese sido tal cuando se abrió el debate hace meses, cuando sabía que estaría sin jugar la liga durante meses....¿Qué pasa con el resto de jugadores que se han dejado la piel en el campo durante todo el año? A eso me refiero, un seleccionador sensato nunca habría metido a un jugador que lleva meses sin tocar bola, sin jugar en equipo, sin "vivir las sensaciones", es por esto que critico o pongo en duda la actitud de Villa y cualquier jugador en la misma línea. Es muy injusto para el resto de jugadores que han disputado una liga esperar la decisión de si meterán a otro que no ha tocado bola.
No, no es ningún héroe, ningún ejemplo a seguir, salvo si este comunicado, repito, lo hubiese dado a conocer hace meses cuando sabía que no jugaría el tiempo suficiente para estar en forma, para estar en equipoç. Son jugadores de élite y no pierden esa sangre, esa lucha, esa entrega, pero no podemos olvidar al resto de las decenas de jugadores que tienen el sueño que algún día tuvo Villa: jugar en la selección española.
No por ello voy a menospreciarle, es un ejemplo a seguir por su trayectoria, por su esfuerzo y por su tesón para recuperarse y volver al máximo nivel.
Muchas gracias y enhorabuena por el blog.
Saludos