sábado, 4 de mayo de 2013

El chicle y el jabón

Realmente parecía que no, pero es que sí. Parecía que hoy no iba a estar, tenía pinta de que al acabar la jornada de clasificaciones cogería el camino del box, se bajaría de la moto a hablar con sus ingenieros y se iría al hotel a prepararse para la carrera, saliendo desde algún sitio que no fuera la primera línea, incrustado en la parrilla, con gente por delante y detrás. Pero ha sucedido que la señal internacional de TV ha conectado con la sala de prensa y en primer plano estaba su sonrisa. Marc Márquez sale tercero, desde la primera fila. Cuando las cosas se ponen para que suceda algo, Márquez entra en plano, se mete en la batalla tenga armas o no, lleve katana o no, tenga armadura o no. Aparece el niño y se acabó. Dijo el día anterior que no sentía la moto. Pero qué es lo que no sientes de la moto? Y dijo: todo; en MotoGP, cuando no sientes algo se te trasmite a toda la moto, puede empezar en el neumático trasero y acabas por sentir que te tiembla la dirección. Bueno, pues sale tercero.

Luego están las caídas. En el entrenamiento de la mañana, de los de arriba, Márquez al suelo, el #35 al suelo. En la sesión de clasificación, Valentino al suelo, el #35 al suelo, Dani al suelo. La de Rossi ha sido a unos 180km/h, la de Crutchlow, deslizando por el asfalto hasta llagar a las piedras, donde ha rodado como un croqueta; la de Pedrosa, como si le hubiera reventado la rueda delantera: la moto se ha desplomado. Ellos se levantan, caminan y si pueden, vuelven. Como los toreros. Uno no se va al hotel sin volver a intentarlo.

El asfalto estaba a 52 grados de temperatura, demasiado para que el neumático agarrase con seguridad. Me lo ha explicado Héctor Barberá: "si el asfalto está frío y el neumático no puede coger temperatura es como si hubiese jabón en la pista, patinas. Si hay demasiada temperatura el neumático se reblandece demasiado y es como si tuvieses un chicle, nunca va a parar, no tiene límite, no te puedes agarrar."

Así que ahí van. Jorge con la pole, sin errores, buscando la vuelta perfecta. Dani con la moto mitad misil mitad diablo, con el infortunio a cuestas. Márquez cabalgando ese mismo misil, sudando y con el ángel de los que tienen ángel. Rossi rezando por una carrera a cinco, soñando con el lío. Y el #35 a saco, con el mono limpio después de la rodada que se ha metido en las piedras. En Jerez. A las dos de la tarde. Tic. Tac. Tic. Tac. Pulsaciones.

PD. gracias por las fotos que me hacéis mientras trabajo




5 comentarios:

  1. Hay bebés que nacen sin que llegue a romperse la bolsa amniótica. Es el médico el que debe rasgarla una vez sale de su madre. Se les llama "en zurrón". Dicen que son unos niños que nacen con un ángel especial, niños con una suerte, una gracia que es un don. un tipo dé persona que tiene y da suerte a los de su alrededor, confiados y luminosos. Marc Márquez, MM, parece uno de ellos.

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    1. es increíble cómo sonríe este niño y qué energía lleva. gracias por el comment!

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  2. Hace tiempo te hice una pregunta sin ninguna falta de respeto y me borraste el comentario, ¿no te sentó bien?

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    1. Lamento no acordarme de tu pregunta. El criterio es: si insultas, borro. Si vienes a tocarme las narices y no pones tu nombre, borro. Tú sabes quién soy yo. Yo no sé quien eres tú, al menos debes dejar tu nombre. Es lo mínimo. Iniciales tampoco me valen. Un saludo.

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  3. Sr. Abad, sabe mal a un profano del periodismo hacer una crítica a un profesional, pero creo que se equivoca en llamar tanto a Márquez "el niño", suena fatal, y en levantar extraordinariamente el tono de voz cuando las carreras acaban, o se ponen emocionantes... Creo que hoy ha mejorado respecto a otros días (para mi gusto, obviamente).
    Un saludo y a disfrutar del privilegio del trabajo que tiene
    Vsss

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gracias por leer. comenta lo que quieras. intenta no insultar, es desagradable.